Por: José A. Gomera
Santo Domingo Este, RD.-El pasado viernes 26 de abril, el alcalde Diò Astacio sometió una resolución para declarar el municipio en emergencia y asignar 280 millones para hacer frente a dicha emergencia, medida que luego fue aprobada por el Consejo de Regidores. La actual gestión comienza con el municipio en emergencia, como si hubiera ocurrido algún desastre natural, o estuviéramos bajo una pandemia o epidemia local, o bajo aviso de algún atentado terrorista, o si las calles del municipio estuvieran llenas de basura. Sin embargo, al caminar por las calles del municipio en estos días, observé que las calles estaban normales, sin ninguna problemática que justificara declarar el municipio en emergencia, las calles limpias, solo algunos puntos aislados de vertederos improvisados, como de costumbre, que para eliminarlos no se necesita declarar el municipio en emergencia, solo reforzar esos puntos con la policía municipal. Mentir es pecado, es el octavo mandamiento.
Según una fuente confiable, el alcalde saliente Manuel Jiménez adquirió unos 76 compactadores grandes, distribuidos de la siguiente manera: 25 para la circunscripción número 2, 25 para la circunscripción número 1 y 26 para la circunscripción número 3. También adquirió 25 camiones pequeños de cielo abierto y la Liga Municipal le donó un compactador grande.
La fuente nos informa que de los 101 camiones existentes, diez tienen averías en el cloche y algunas mangueras están dañadas, y que la compañía se comprometió a darles mantenimiento pero hasta ahora no lo ha hecho. El actual alcalde dijo el primer día al mando del ayuntamiento que 40 de los 100 camiones de basura comprados por la pasada gestión están dañados. Mi pregunta es, ¿por qué el equipo de transición no informó sobre las supuestas averías de los camiones? ¿Por qué el primer día se dan cuenta de esto como por arte de magia? ¿O es que no hay 40 camiones dañado y están buscando dañar más la imagen, ya dañada desde antes de la gestión de Manuel Jiménez, porque Manuel no quiso apoyarlo en el proceso electoral? La venganza es pecado.
El municipio en emergencia «por basura» y los 40 camiones de basura dañados. Esto no es más que un plan del alcalde Dio Astacio para contratar una compañía privada para la recogida de basura. Cuando uno busca privatizar algo, exagera o inventa una crisis, después dice que el ayuntamiento no puede hacer frente a la recogida de basura y contrata una compañía privada. El municipio en emergencia es para licitar una empresa de emergencia, sin la necesidad de la aprobación del Consejo de Regidores, porque estamos en emergencia y todos los poderes pasan a las manos del alcalde. Pastor, eso es pecado.