Dijo que «traer el tema de la construcción del canal en el río Masacre, que lleva casi dos años ejecutándose, es un feo espectáculo que coloca a la República Dominicana a nivel internacional como un país que le niega el agua a una nación pobre».
RUBEN BICHARA
De su lado, Rubén Bichara, tamnién miembro del CP del PLD, afirmó que el gobierno debe iniciar de inmediato una discusión sin matices políticos sobre la desviación del Masacre.
«Evitar que la víctima de todo esto sea la verdad. Que nosotros podamos tener una discusión abierta, pero lejos de la contaminación de la política. Esto no es un tema que soporte que se le quiera dar un uso político o de conveniencia o de beneficencia», expresó.
Consideró conveniente la formación de una comisión que discuta el tema a profundidad, que sea participativa, que discuta el tema con objetividad con el desarrollo mental y entonces en esa comisión que se vislumbren las mejores soluciones y propuestas para este conflicto.
«Y es lo que hace falta, una discusión a fondo consciente, lejos de la contaminación política en un tema tan trascendental para la República Dominicana», señaló.
Explicó que «hoy se refleja de este modo, mañana se reflejará de otro, pero es justo que una comisión discuta el tema a conciencia y pensando en el país y no en beneficios políticos a través de un tema tan delicado”, comentó.
Dijo que más allá de organismos internacionales, los gobiernos de los países que tienen el poder económico para ayudar van a ser necesarios en la búsqueda de una solución.
«En este caso se quiere más allá de términos materiales una comprensión política de derecho que tiene un país y necesidades que tiene otro. Por eso tiene que haber una comisión que a profundidad discuta el tema y lo aleje de la política y lo discuta con objetividad y buscando una solución duradera en el tiempo también en este caso», agregó Bichara.
ABEL MARTINEZ
En iguales términos se había expresado el candidato presidencial del PLD, Abel Martínez, quien ha propuesto la creación de una comisión de expertos, juristas y sectores representativos de la sociedad dominicana para gestionar la situación, excluyendo al presidente Luis Abinader, en razón de que, en su condición de precandidato, genera una contaminación electoral al debate.