Santo Domingo Este, RD. -Manuel Jiménez, actual alcalde de Santo Domingo Este, es una figura política que ha generado opiniones diversas en la población. En su momento, fue visto como una alternativa fresca y novedosa en la política local, sin embargo, con el paso del tiempo, su gestión ha generado críticas y descontento en algunos sectores.
Arturo Quiñones delegado político del PRM ante la Junta Municipal Electoral Santo Domingo Este, afirmo en el Programa Lo último de la Tarde, que conducen Daneris Santana y José Marte Capellán, que uno de los aspectos que ha contribuido a la percepción negativa de Jiménez es su trayectoria política. Su ascenso al poder fue producto de una coyuntura particular en la que se vio forzado a abandonar el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) debido a que no se le permitió participar en un proceso de convención interna. Esto lo llevó a abandonar el PLD y eventualmente, a postularse por una agrupación minoritaria.
Quiñones narro que la situación actual de Jiménez es aún más complicada. A pesar de que hoy es el alcalde de Santo Domingo Este, no puede asumir el liderazgo del Partido Revolucionario Moderno (PRM) en el municipio sin haber pasado por un proceso de convención interna. Además, su gestión como alcalde ha sido criticada por sectores importantes dentro del PRM, quienes consideran que ha maltratado a la militancia y a la dirigencia del partido. Ver entrevista https://www.youtube.com/live/7b8iHfOUyM0?feature=share
Arturo manifestó, que en los momentos actuales el escenario plantea un dilema político importante para Jiménez. Por un lado, su falta de apoyo dentro del PRM podría dificultar su reelección como alcalde en las próximas elecciones. En ese sentido argumento que el partido se está preparando para llevar al Ayuntamiento de Santo Domingo Este, un auténtico perremeista.
En este contexto, es importante reflexionar sobre el costoso error político que ha cometido Manuel Jiménez. Su decisión de abandonar un partido consolidado en busca de una oportunidad personal ha tenido consecuencias negativas para su carrera política y para el municipio que gobierna. Si bien es importante tener iniciativa y liderazgo en la política, también es fundamental respetar las estructuras partidarias y las reglas del juego democrático.
En definitiva, el caso de Manuel Jiménez es una lección para los políticos que buscan el éxito personal sin considerar las implicaciones de sus acciones en la comunidad y en el sistema político en general. Su error político podría costarle caro en el futuro y es importante que tome medidas para reparar los daños y reconstruir su relación con el PRM y la ciudadanía en general.
