Por Máximo López hijo.
El presidente Leonel Fernández, abandonó el 19 de octubre del 2019 el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y seguido pasó a crear un nuevo partido, que llevaría por nombre la Fuerza del Pueblo (FP), como si la mano de DIOS estuviera envuelta en este proceso, fue escogido para identificarlo el color verde -un color elemental y primario- que está íntimamente ligado a la esperanza y a la renovación que llega luego de un lapso de privación.
Aquí, cabe evocar un proverbio alemán que dice: “cuando más áridos los tiempos, más verde es la esperanza”.
La decepción del gobierno del [“cambio”] del presidente Abinader ha sido una realidad tan amarga, que el senador de su propio partido, por la provincia de Bonao, Héctor Acosta “el torito” dijo: “nosotros le hemos fallado al pueblo”, pero, eso no se queda ahí, figuras de la talla de Guido Gómez Masara y Ramón Alburquerque han sido alejado del Partido Revolucionario Moderno (PRM), como si tuvieran la peste negra «que arrasó Euro-Asía en el siglo 14» para así callar sus voces disidentes, criticas; ciertas por demás.
Para remate, como si fuera una novela barata que estuviéramos leyendo, el presidente Abinader tiene la cachaza, la cara dura de decir que se quiere reelegir.
¿Qué nos va a ofrecer usted?
¡señor presidente!
¿UN CAMBIO?
¡Por Dios! …ya lo conocemos.
El profesor Bosch hacía referencia a un proverbio árabe que decía: “sabio tú si me engañas la primera vez, estúpido yo, si lo haces la segunda vez”.
Presidente Abinader, un hombre no puede saltar fuera de su sombra, como tampoco puede aplaudir con una sola mano, ¡USTED! y el ¡PRM! han sido un gobierno malo, por eso es por lo que, nuevamente, sonarán en todos los rincones del país la consigna: “eh pá fuera que van”.