NUEVA YORK.- El comisionado del Departamento de Transporte de la Ciudad de Nueva York, Ydanis Rodríguez, recordó que este sábado vence el plazo para que los dueños de negocios de venta de comida que tienen mesas en aceras o en calles soliciten sus permisos de renovación ante
Un total de 12,000 negocios instalaron cobertizos en espacios exteriores que salvaron a miles de restaurantes en los cinco condados de irse a la quiebra durante la pandemia de covid-19.
A pesar de las críticas que muchos neoyorquinos manifestaron contra el programa, mayormente quienes se vieron afectados al perder espacios de estacionamiento en las calles, la Ciudad dio vía libre para que la iniciativa, que comenzó como un programa temporal, se volviera permanente.
INSTA A ENVIAR SOLICITUDES ANTES CULMINE PLAZO
Rodríguezz instó a los comercios de comida a que envíen sus aplicaciones rápido para continuar sirviendo comidas y bebidas afuera, bajo el programa conocido como “Dining Out NYC” o tendrán que eliminar sus instalaciones para evitar penalidades.
“Queremos decirle a la gente que quiere seguir teniendo mesas y sillas en aceras y calles para poder vender más sus comidas y emplear a más personas, que si números les cuadran y ven que pueden tener ganancias usando esos espacios, tienen hasta el 3 de agosto para solicitar permiso, de lo contrario enfrentarán multas. La primera será de $500 y la segunda de $1,000“, dijo el comisionado de origen dominicano.
Explicó que “esta administración se enfoca en la perspectiva del Alcalde Adams de ayudar a los pequeños negocios. No queremos penalizarlos, pero si no presentan sus aplicaciones antes del 3 de agosto, enfrentarán multas”.
Indicó que los comedores exteriores no solo son para restaurantes sino para cualquier negocio de comida o bebidas que tenga permiso del Departamento de Salud y de venta de licores. También los nuevos negocios que deseen sumarse al programa pueden enviar sus solicitudes, a través del sitio web del Departamento de Transporte.
TODOS PUEDEN APLICAR
“Pueden aplicar todos los que les interesa usar espacios en las aceras y carreteras, no solo para los restaurantes. También negocios con licencias para servir comidas, como sitios de venta de jugos verdes, sándwiches, pastelitos. Cualquier tienda que tenga cocina que tenga cocina. Comer al aire libre mejora nuestras comunidades y nos gusta ver que ahora es una característica permanente de las calles de la ciudad de Nueva York”, agregó el funcionario.
El Departamento de Transporte no compartió datos exactos sobre el número de aplicaciones que han recibido hasta ahora por parte de restaurantes que desean continuar prestando sus servicios en espacios exteriores. Sin embargo, estiman que habrá una reducción, pues muchos negocios que después de la pandemia se han puesto en pie nuevamente han optado por desarmar sus cobertizos exteriores.
“Muchos decidieron removerlos, como se ve por ejemplo el Dyckman, en el Alto Manhattan, donde había restaurantes usando buena parte del espacio exterior pero seguramente hicieron sus números y vieron que no lo necesitaba. Por eso hacemos el llamado para que los que deseen continuar con el programa envíen sus solicitudes antes del 3 de agosto y los que no, desarmen sus estructuras. De lo contrario, a partir de agosto 4, habrá docenas de inspectores yendo a los lugares y lo que menos quisiéramos es poner multas, pero muchas veces el neoyorquino espera hasta el último momento”, dijo Rodríguez.
REVELARA NUMERO COMEDORES EXTERIORES
Anunció que en agosto revelará los datos finales sobre el número de negocios que continuarán prestando servicios en comedores exteriores, pero recalcó que con el turismo creciendo cada vez más, el programa “Dining Out NYC”, es una buena opción para que los restaurantes mejoren sus ingresos y puedan contratar a más trabajadores.
“Como dijo el alcalde Adams, Nueva York no va a regresar, Nueva York ya regresó después del Covid, y así lo muestran los 62 millones de turistas que tuvimos en el 2023, 12 millones más que en 2022, así que esta es una gran oportunidad para que negocios que vean que les conviene continúen y los nuevos que quieran estar en aceras y calles se sumen”, subrayó.
Advirtió que quienes usen espacios en aceras podrán estar ahí de manera permanente durante todo el año, pero quienes opten por ubicar cobertizos en las calles solo podrán tenerlos entre abril y noviembre de cada año.
Explicó que la Ciudad quitó el costo de arquitectura de las estructuras que estaba entre 30,000 y 40,000 dólares, pero mencionó que quienes continúen en el programa deberán seguir pautas de higiene y protección contra roedores nuevas como tener una base en el piso y ser removibles, pues cada semana deberán limpiar debajo de las estructuras y al final del año desarmarlas.
“En nuestro sitio web y a través de muchas conversaciones hemos informado sobre los requisitos de las estructuras. Escuchamos las voces y preocupaciones de la comunidad y por eso hicimos cambios”, agregó.
EL COSTO
Indicó que el costo para usar los espacios exteriores será de $1,050 para cobertizos en calles y $1,050 para espacios en acera por un períodos de 4 años, más $6 dólares por cada pie cuadrado.
Dijo que «esos recursos permiten que la agencia pueda tener todo el personal necesario para procesar aplicaciones y tener suficientes inspectores. Aprendimos lo que necesitaban los restaurantes y al mismo tiempo escuchamos a as comunidades. Por eso cada negocio debe tomar medidas para garantizar que haya buena higiene y que los neoyorquinos de todos los vecindarios puedan estar sentados disfrutando al aire libre y que no sea un privilegio solo de ciertos barrios, como ocurría antes que la clase trabajadora no tenía esa opción”.
Recalcó que los restaurantes con instalaciones temporales para cenar al aire libre que presenten su solicitud antes del 3 de agosto deben hacer que sus instalaciones cumplan con los requisitos de diseño de Dining Out NYC dentro de los 30 días posteriores a la aprobación de la solicitud o antes del 1 de noviembre de 2024.