Por Jhonny Trinidad
SANTO DOMINGO.- La Asociación Dominicana de Industrias textiles (ADITEX) recomendó al Ministerio de Trabajo que fiscalice los negocios chinos en el país, la mayoría de los cuales son informales, con un alta empleomanía de extranjeros indocumentados y violan las leyes de protección laboral.
«Este tipo de fiscalización debe realizarse con todos lo negocios chinos del país, la mayoría de los cuales son informales, con un alta empleomanía del nacionales chinos y extranjeros ilegales, que igual que los dominicanos, no gozan de las protecciones laborales que demandan la leyes dominicanas, además de que aparentemente reciben maltratos de toda índole, como pudo ser evidenciado en el lamentable caso en que un empresario chino fue ultimado por una empleada que, según muestra un video que se hizo viral en las redes sociales, fue agredida físicamente por el empleador», expresó la entidad en un comunicado.
Indicó que «los negocios de nacionales chinos han incrementado exponencialmente en los últimos años en nuestro país y han evolucionado de pica pollos y pequeños supermercados, sectores en el que han desplazado a los dominicanos, hacia grandes establecimientos donde venden todo tipo de mercancías, localizados en las calles principales de comercio en la capital y en todo el país».
«Como toda la mercancía que venden es importada de china, están afectando en forma importante el comercio y la industria nacional, entre las cuales está la industria textil. Tenemos informaciones de que estos productos son importados en forma irregular utilizando subterfugios que les permiten pasar por las aduanes, sin pagar los impuestos que deberían, y además, como son informales, en su gran mayoría no pagan ITBIS ni seguridad social, por lo que representan una competencia desleal para las empresas nacionales que tiene que cumplir con estas obligaciones», subrayó.
Agregó que «solo tomando en consideración estos aspectos, están haciendo un daño de gran importancia a la economía nacional, pero también donde debemos destacar la gran cantidad de empleos para dominicanos, que se pierden por estas importaciones, en los sectores industriales y comercio, los ingresos que dejan de entrar a la seguridad social, que tienen que ser asumidos por el estado y el impuesto sobre la renta».
«Considerando todas estas realidades, llamamos la atención de los dominicanos de todos los niveles sociales, en especial a las instituciones del Estado, para que hagamos conciencia de que, si no tomamos acciones para corregir estas anormalidades estaremos condenados a seguir en el subdesarrollo mientras contribuimos con el desarrollo de otros países», concluyó.